viernes, 30 de noviembre de 2007

Maduritas (I)


Las maduras tienen algo especial. Dejando de lado cualquier tipo de atributo físico que se les pueda ocurrir, su esencia consiste en ir al frente. Después de rutinarios años de sometimiento, van a buscar la pasión en la sangre joven y adolescente. Cansadas de las promesas de felicidad y de los falsos proyectos, van a intentar divertirse como nunca antes. Ya con años de carrera, van a aplicar todo lo aprendido con alguien que no les haga planteos ni sueñe con la familia ideal. No hay mejor que el joven o adolescente para que disfruten y descarguen su ira. Si bien se las juzga y desprecia, comparándolas con el felis silvestris catus, más conocido como gato, ellas no van a tener problema en aceptar cualquier tipo de propuesta indecente. Siempre dispuestas a todo, a toda hora y lugar; afortunado será el hombre que se tope con semejante mujer y se someta a los deseos de una madurita.

Maduritas (II)


Dejando el amor a un costado, el joven pasará sus más agitadas noches en vela, intentando domar a un animal salvaje. Nadie mejor para complacer a una vieja musa guerrera, que un soldado con todas las armas listas para el combate. El joven de hormonas alteradas será el elegido para la misión. La desesperación puesta en evidencia y velozmente captada por las jovencitas, va a ser el fruto más preciado de la veterana hambrienta. Las profesoras del sexo, como las llaman en mi barrio, están cada vez más al acecho. Será cuestión de encontrar la indicada y entregarse; aprovechar las clases particulares y aprender cada vez más de estas profesionales.

Si la tuviste, ¡Contá tu experiencia con una madurita!

lunes, 26 de noviembre de 2007

¿Hasta que punto depende de nosotros? (1)


Luego de un delicado trabajo de campo, noté ciertas actitudes del sexo opuesto que me llamaron la atención y quería compartirlas con ustedes. A la hora de lidiar con la mujer, de insistir y parlotear, cada uno usa sus armas como más le convenga y lo crea conveniente. Esta quién pasa horas hablando sin resultado alguno, y esta quién en menos de cinco minutos consigue lo que quiere. ¿Qué tan hábil puede ser alguien, para conseguir en unos minutos, lo que a otros le cuesta añares? ¿Qué factores juegan en este tipo de situaciones? Seguramente muchos y la atracción física es uno de ellos. De todas maneras, es la actitud de la mujer que estuve estudiando, y su disponibilidad en ciertas ocasiones. No es precisamente el aspecto lo determinante. ¿Hasta que punto, el levante, depende de nosotros? Me preguntaba porqué hay días en los que ellas terminan teniendo sexo con un desconocido, cuando las mismas, a la semana siguiente, pueden transformarse en la figurita más difícil del lugar. Entrevisté a diez muchachas que pasaron por esta experiencia. Hete aquí sus testimonios:

¿Hasta que punto depende de nosotros? (2)



  • “A veces tengo el sí mas fácil, depende el día. Si me agarrás de mal humor cagaste, aunque hay otras veces que voy mejor predispuesta y si pego buena onda con alguno puede que pase algo”
  • “Un día estuve con un flaco millonario, muy fachero, y me le regalé, no podía decirle que no con todo lo que me había invitado, que se yo…en cambio, mi novio actual tuvo que remarla 3 meses para que aceptara salir a tomar algo con él, jaja que se yo, son situaciones diferentes”
  • “Es relativo al momento que este pasando: cuando mi novio me dejó después de seis años de relación, quedé destruida. Empecé a salir de joda con mis amigas y me bajaba a todo hombre que se me cruzara por el camino. Sabía que estaba mal, me sentía una trola, pero supongo que me levantaba la autoestima y por eso seguía. Quería ocultar mis frustraciones y no encontré mejor manera de hacerlo que teniendo sexo. Hoy ya superé la situación y antes de encamarme prefiero conocer a la persona, saber sus gustos, ideas, etc.”
  • “Hay flacos lindos que se piensan que se pueden llevar el mundo por delante y me encanta boludearlos y dejarlos calientes, total siempre tengo para elegir, los flacos se regalan mal”
  • "Hay noches que antes de salir, ya se que no voy a estar con nadie. Se trata de pasar el rato con amigas y nada más. Otras veces, sin ir muy lejos, el sábado pasado, todas mis amigas salían con los novios y yo me quedé sola en mi casa; un flaco me invitó a salir y terminé durmiendo con él en su departamento. Supongo que sentirme sola me llevó a eso, pero la pasé bien”

¿Hasta que punto depende de nosotros? (3)


¿Interesantes reacciones no? Confesiones sorprendentes. A modo de conclusión pude notar que hay factores externos que influyen: experiencias de vida, estados de ánimo, humor y ganas. Depende de nuestro ingenio saber como actuar en cada situación particular. Conseguir el objetivo puede tornarse difícil, ¿Será cuestión de tiempo? No existe una respuesta inmediata. La situación y el momento jugarán un rol determinante. Una estrategia bien planteada puede no funcionar con una mujer despechada o enamorada. Adaptarse no es tarea sencilla. Entender y seguir es la mejor opción, muchas veces el resultado es relativo y esta más allá de nuestro alcance. Habrá que esperar el momento apropiado.

Si sos mujer, contáme tu experiencia. Si sos hombre, dame tu opinión sobre el tema. ¿Por qué crees que ellas actúan así?

martes, 20 de noviembre de 2007

El consejito del día 2 - El beso en boliche ¿sirve?


Después de un delicado trabajo de campo, observamos la vulnerabilidad de la mujer y su disponibilidad a que algo pase. Es cuestión de lidiar un rato y probablemente el resultado sea positivo. Quizás un poco de histeriqueo, caricia, mirada…pero algo nos vamos a llevar. Ahora… ¿Hasta que punto sirve besar en discoteca? ¿Hasta donde importa ese contacto labial? Es un tema interesante y profundo.

La repetitiva actitud de tirar la boca constantemente, para al décimo acercamiento rescatar un besito o piquito, no sirve en absoluto. Si bien es verdad que a veces uno gana por cansancio, no estamos dejando la mejor imagen en caso de querer invitarla a salir al día siguiente. Por el simple hecho de no querer irse con el cero en la frente, algunos hacen lo imposible y se conforman hasta con el bicho más raro. ¿No es mejor hablar para caer bien y arreglar un pronto encuentro? Remplacemos la ansiedad, el aquí y ahora, pensando en un futuro cercano. A veces, intercambiar un numero de celular, puede sumar más que un beso robado. Habrá que leer la situación para ver que actitud adoptar. ¿Desesperación o austeridad? Ellas lo huelen y es difícil de disimular; apurarse no es bueno. Pensar antes de actuar, nada más.

miércoles, 7 de noviembre de 2007

La entrada en calor (1)


Antes de hacer deporte entramos en calor y elongamos. Movimientos precompetitivos nos van a servir para no lesionarnos y empezar nuestra actividad física al 100%. Lo mismo sucede con el chamuyo. ¿Suena raro no? Entramos a la disco y la noche está en pañales. Poca gente, cada uno con su grupo de amigos/as, mientras algunos toman algo otros empiezan a recorrer el lugar. Etapa de reconocimiento que a veces se hace larga y se convierte en tiempo perdido. “Todavía no son ni las 3, en un rato arranco” o “Recién entramos, hay que esperar un poco” son algunas de las excusas que se suelen escuchar. ¡Esos primeros minutos son lo más importantes, donde más concentrados tenemos que estar! Cuando el ambiente esta tranquilo y la competencia ni siquiera entró en calor, nosotros ya estamos palpitando el primer tiempo. ¿Qué sugiero? Que aunque sean tiros al aire, empecemos desde temprano sin importar el resultado. Mi teoría bien podría ser criticada: es temprano y todavía las chicas prefieren estar entre amigas, hablar, bailar, tomar algo, etc. ¿Para qué intentar ya sabiendo el resultado?

La entrada en calor (2)



Porque nuestro objetivo no va a ser el contacto físico inmediato, si no simplemente un saludo, un comentario, un chiste, que ella sepa que nosotros, esa noche, estamos ahí, que fuimos a bailar a ese lugar y que estamos dispuestos a dar pelea, aquí y ahora. Una breve y temprana charla, es una inversión a corto plazo. Estoy en contra de la búsqueda desesperada de las cinco de la mañana y de la famosa “agarrada de mano”, ¿Porqué jugar en tiempo de descuento cuando el partido dura toda la noche? Terminar el dialogo con un “Bueno mas tarde te busco”, “En un rato nos vemos”, puede ser positivo…pensemos que el trabajo sucio ya fue realizado y solo queda lo mejor. Evitemos la desesperación, tan bien detectada por el sexo femenino, que no hace más que jugarnos en contra y ahuyentarlas. Hilando un poco más fino, la búsqueda empieza cuando bajamos del auto, sigue en la fila, alcanza la cúspide adentro, y termina afuera nuevamente, en el mismo lugar donde empezó todo, pero con un par de horas de diferencia y con un sol radiante pegándonos en la sien (si se puede evitar este último momento, mejor). Es una pirámide que tenemos que escalar y aprovechar la cima para dar el golpe. A medida que vamos bajando, las posibilidades van disminuyendo. ¡Manos a la obra!

¿Qué opinás de la entrada en calor? ¡Aplicála y contame si resultó!