domingo, 26 de agosto de 2007

En las fiestas de música electrónica (parte 1)


Si alguna vez fueron a una fiesta de música electrónica sabrán de qué les hablo. El DJ toca su música arriba de la cabina y la gente baila en la pista. Se respira un clima festivo, donde casi todos buscan pasarla bien, cada uno a su manera. Simplemente se trata de dejarse llevar por la música y bailar toda la noche. El grupo de amigos que concurre a estos eventos, intenta encontrar un lugar fijo y cómodo en la pista para poder disfrutar de la música y moverse libremente.

Hete aquí que surgen varias preguntas: ¿Cómo hacer para encarar a la chica que nos gusta cuando la mayoría esta en la “suya”? ¿Cómo acercarse? Los códigos que se manejan son otros. No es un lugar donde la gente vaya con el objetivo de “pescar” algo o sacar algún teléfono. Se va específicamente a bailar y el público va a escuchar al DJ.

Dejando de lado cualquier otra actividad que se pueda realizar en un evento semejante quisiera meterme de lleno en las técnicas de levante, o simplemente concejos específicos para dichas fiestas. Me molesté en preguntarles a varios amigos y amigas que concurren seguido a boliches electrónicos y muchos coinciden en ciertos puntos. Milena me decía: “yo creo que en la movida pasa todo por el tema de los mimos, y esas cosas, o de conectarte bailando con alguien.”; mientras Paola me comentaba algo parecido: “yo pienso que es conectarte con la minita, jugar con ella, bailar! que a eso vas al boliche/fiesta ; miradas, sonrisas y demás gestos, a pleno, regalarle algo lindo (un pin de algo que les guste a las minitas o una golosina copada, o crema)”...SIGUE

En las fiestas de música electrónica (parte 2)


...No es raro que en un ambiente donde la droga cobra bastante protagonismo, se utilice a veces como motivo de charla o como excusa para interactuar con el sexo opuesto: ¿Me convidas? ¡Proba esta que te deja re loca! ¡Como me pegó! E innumerables comentarios que reflejan diversos estados y momentos. Sin embargo, esta técnica puede fallar: “.si hay algo que me fastidia bastante es que venga un flaco y, para sacar tema, me pregunte que tomé, o de una arranque con la contabilización de lo que tomó o dejó de tomar...todo bien! pero noooo!” me contaba Rocío, que recuerda la primera vez que fue a Pacha con nostalgia y melancolía. Por último me pareció interesante la respuesta de Tamara; “si mirás y te conectás ahí te das cuenta si hay o no hay feeling. No es que hay una técnica de levante, ni mucho menos, se trata de actitud...”. Concuerdo con la opinión de Tamara, creo que todo pasa por la onda y la actitud. Conectar bailando, acariciar y sentir, disfrutar la música de a dos, mirar y seducir. Ahí esta la clave.

Debido a la gran popularidad que cobró esta música en los últimos años, mucha gente nueva se acercó a discos electrónicas. Hoy en día, al ser un movimiento con un público nutrido de gustos y pensamientos tan distintos, podemos encontrar desde la actitud de chamuyo mas rara, hasta la más tradicional. Sin embargo, y sobretodo para los verdaderos amantes de la música electrónica, hay sentimientos y experiencias únicas que solo los fanáticos podemos vivir, entender y sentir en una pista de baile…

miércoles, 22 de agosto de 2007

El consejito del día 1


Abro esta nueva sección, con el objetivo de dar algunos consejos y sugerencias para facilitar el contacto en ciertos lugares donde no acostumbramos hablar. Obviamente cualquier idea o anécdota vuestra, va a sumar para adquirir nuevos conocimientos. Cuántas veces nos habremos cruzado en la calle, en el tren o colectivo, mujeres de otro planeta; simplemente atinamos a girar la cabeza y a quedarnos mirando, sin hacer absolutamente nada, alimentamos la vista por unos segundos y seguimos camino. El piropo o elogio no nos va a llevar a ningún lado; el teléfono no está escrito en sus ojos, así que descartemos el clavado de mirada. Si alguna vez hiciste algo parecido, que no pase nunca más; juramentémonos no volver a repetir una actitud semejante. ¿Qué hacer ante este tipo de situaciones? Para eso abro la sección: El concejito del día.
Voy a empezar con algo simple, corto, básico, pero efectivo. Estamos en el colectivo o en el tren y vemos una chica que nos gustó. Tenemos poco tiempo ya que estamos por llegar a destino. Sacamos el boleto y rápidamente le escribimos un mensaje con nuestro mail o teléfono. Asegurémonos que haya existido un breve cruce de miradas previas. Antes de bajar, pasamos por donde esta ella sentada, y cariñosamente le dejamos nuestro boleto con un mensaje provocador, misterioso, gracioso, alocado, improvisado. Un mensaje que la incite a contactarnos. ¿Qué se les ocurriría poner? ¡Intentémoslo! Probar no cuesta nada. Yo ya dejé el mío...

lunes, 20 de agosto de 2007

Confessions on a dance floor


Recorriendo algunos foros y blogs, noté un pedido generalizado del sexo masculino reclamando la fórmula para levantar mujeres. Muchos preguntan e intercambian frases de inicio y otros cuentan sus exitosas andanzas en los boliches. “Me cuesta empezar a hablar con las chicas, me trabo y no se como acercarme,” comentaba Sebastián Calzoni, de 21 años, en una conocida página de Internet. Los comentarios no tardaron en llegar y cada usuario dejó su mejor anécdota:


-Yo le decía a las minas que trabajaba en la tele, y cuando me lo negaban caía un amigo que decía ¡¿vos no sos el que trabaja en la tele!? (Radek Stepanek)

-Les preguntaba: ¿Querés sexo de calidad? Cuando me devolvían una sonrisa y no se iban es porque ya era fija (Nicolas Wajnfeld)

-A veces hablo en inglés haciéndome el extranjero para levantarme minas (Francisco Lombán)

-Me hago el astrólogo y le digo cosas que le pasa a todo el mundo como "sos una persona que le cuesta mostrar lo que tiene en el interior" o "sos de poner más la oreja por los demás antes que sacar tus problemas" (Kung Lao)

-Les pregunto "Disculpá, ¿no sabés cuanto cerró el dólar? (Rocco Siffredi)

-Si me paro con un trago en la mano y veo que una mujer me lo está mirando le digo "¿Te quiero convidar y vos? (Jonathan De Becker)


Yo me pregunto si realmente importa qué se diga, o si el cómo es más importante; creo que la actitud y simpatía es lo que cuenta. No hay una fórmula, sino que hay espontaneidad e inteligencia. Si bien lo primera impresión, el aspecto, la facha, son importantes, los temas sobre los que vayamos a hablar van a abrirle la puerta a la segunda parte de la relación. Decisión y seguridad van a ayudar a decidir, van alejar el fantasma del rachazo y del rebote; de nosotros depende completar la misión.

Sin embargo, después de haberle preguntado a varias, no todas las mujeres opinan ni se conquistan igual, pero sobre eso voy a hablar en otra nota. ¿Usás alguna técnica en especial? ¿Sos de decir lo primero que te salga o vas con algo predeterminado? ¿Crees que “la parla” es fundamental o pensás que el aspecto es más importante?

viernes, 17 de agosto de 2007

¡¡Basta de pedir MSN!!

Cuando conocemos a alguien en un boliche acostumbramos a pedirle el MSN. Lo anotamos en el celular y seguimos nuestra búsqueda. Si la chica era linda y simpática nos vamos contentos a casa para buscarla y esperar que se conecte. “Aunque sea saqué un MSN”, le comentamos a nuestros amigos.

Pasa un día y nada, pasan dos días, notamos que nos autorizó, pero no la vimos conectada; recién al tercer día podemos cruzar unas palabras, aunque no muchas porque justo se estaba yendo…Así pasó una semana y todavía no tuvimos oportunidad de charlar con la misma onda que lo hicimos aquella noche que la conocimos. Si la chica realmente nos gustó, nos empezamos a preocupar: ¿Habrá visto mis fotos y no le habré gustado? ¿Me habrá dado el MSN para sacarme de encima? Después nos mentimos a nosotros mismos y nos consolamos pensando: “Bueno, seguramente estará estudiando mucho y no tendrá tiempo de conectarse”…Como si no tuviera dos minutos para ir a la computadora y hablarnos, por favor! Con el tiempo y varios estados no disponibles se va perdiendo contacto hasta que somos agregados a esa extensa y odiosa ignore list. Es hora de aceptar que perdimos parte de nuestra noche con alguien a quien no le interesábamos.

CONCLUSIÓN: Basta de pedir MSN en boliches y bares. Las mujeres lo usan de freezer: nos dejan en sus listas de adorno. Cuando se sienten solas nos hablan e histeriquean un rato, pero después el pibe que nunca les dio bola aparece, y nosotros volvemos a lista de espera…¡¡Hay que pedir Teléfono!! Pongámonos estrictos y no nos conformemos con una simple dirección de e-mail que no sirve para nada. No queremos esperar que ella se digne a darnos bola, o a que este completamente sola, para aceptar nuestra invitación o propuesta. Sin perder más tiempo la llamamos a mitad de semana para arreglar lo que sea; a las mujeres les encanta decir que no por MSN, es fácil y divertido. No les hagamos el trabajo más fácil de lo que ya lo tienen. Ganemos tiempo o el tiempo acabará con nosotros.

martes, 14 de agosto de 2007

Me cuesta pegarle al arco y definir


¿Como saber cuando es el momento justo para dar el último golpe? Pasar de la charla al beso a veces se puede tornar complicado, más si nos cuesta tomar esa decisión donde nos jugamos todo o nada. Miedo, presiones, inseguridad, incomodidad; hay varios motivos que nos impiden dar el paso final.

En la primera salida intentamos conocer a la mujer, tomamos algo, conversamos sobre la vida, el trabajo, y después de un par de horas la devolvemos a su hogar. ¿En que momento conviene tirarle la boca y no quedar desubicados? ¿Cómo hacerlo si nos cuesta “definir”? Un viejo amigo me dijo: “esas cosas se dan solas”… yo creo que en parte es así y en parte tenemos que buscar que se den. Buscar el contacto físico, el abrazo cariñoso, la caricia de rostro, el besito en el cuello. Elijamos un bar oscuro, bien ambientado, pongámonos cómodos en unos sillones y al acomodarnos procuremos no mantener tanta distancia de nuestro objetivo. Esto en una heladería sería realmente complicado. No podemos arrojarnos encima de ella si estamos hablando de sus problemas familiares. Hay que encontrar un momento, donde los dos estemos en confianza y relajados. Hablemos de sexo sin prejuicios, de amores y de actitudes de cada uno frente a estas situaciones. Hagamos que el sexo no sea tabú sino natural. No vamos a empezar preguntando si autopista o colectora, pero podemos preguntar que tipo de besos le gustan, si es de ir al frente o si es de esperar, que es lo primero que le ve a un chico, etc.…a medida que avancemos las preguntas pueden ir subiendo de tono, todo depende como se vaya desarrollando la charla. Unas caricias en el pelo, miradas que van y vienen, un poco de buena onda y listo. ¿Parece fácil no? Pero no siempre se dan las cosas perfectas, las presiones pueden jugar en contra, la ansiedad y el miedo. Será cuestión que entremos en confianza; el amor y el sexo nos van a ayudar a aproximarnos. No siempre es necesario el clásico elogio, aunque a veces viene bien siempre y cuando no abusemos de él.

Hay otros planes si la situación o el lugar no dan para la acción. El plan B es el auto y el famoso beso de despedida, son 2 o 3 minutos que dejan abierta la posibilidad de un segundo encuentro, quizás mas fogoso y pasional. Ante la inseguridad también podemos insinuarlo: “¡Me imagino que me vas a despedir como se debe!”. En una discoteca puede resultarnos más fácil, pero eso lo voy a tratar en otro informe más adelante.

Tampoco nos conviene forzar la situación ya que no besar en la primera cita no es la muerte de nadie, pero que en la segunda no pase lo mismo, ahí la chica nos puede tildar de “lentos”, con toda razón, y rechazar la propuesta siguiente, con más razón todavía. A veces quedamos bien si no intentamos nada la primera vez; es algo que les da más ternura a algunas mujeres, alimentada por el comentario de sus amigas. En un boliche podemos quedar mal tratando de tocar partes intimas, quizás sea más fácil y placentero tocarlas al día siguiente y en un lugar privado. Paciencia, no desesperarse ni tampoco dormirse. La primera salida es una primera impresión, de nuestras actitudes va a depender que haya una segunda vez. No pensemos en el momento de besar, disfrutemos cada segundo de la charla. No nos dejemos influenciar por los comentarios de los amigos envidiosos como: “¿La llevaste a su casa y no te la garchaste?” o “¿Toda la noche hablando en el bar y no te la llevaste a un telo? Oídos sordos a todos ellos. Mostrémonos seguros y relajados, que vamos a lograr nuestra misión primordial. No dejemos pasar el segundo de silencio de las tres de la mañana ni el cruce de miradas, es ahí donde damos el golpe. Ganar o perder es relativo, lo importante es dejar todo.

lunes, 13 de agosto de 2007

En la facultad también (parte 1)

TODO SIRVE

¿Cómo hacer para hablar con la cantidad de chicas que se nos cante y no quedar escrachados? ¿Cómo jugar a varias puntas? ¿Cómo hacer para que la “compañera de la facu” se transforme en “el garche de los fin de semana”?

Lo primero que hay que tener en cuenta es cómo nos vamos a acercar y con qué propósito. Sugiero que las primeras clases no hablemos tanto y nos vayamos dando a conocer de a poco. Pidamos apuntes, consultemos las dudas acerca de la bibliografía (si no tenemos, inventamos), contemos en que materias nos anotamos, cuáles rendimos. Intentemos sentarnos al lado de ella, ofrezcamos nuestra ayuda y lleguemos temprano a la clase para tener unos minutos de charla con las compañeras, aprovechemos cada segundo, cada chiste de la profesora para reírnos con ella, cada tema para debatir y confrontar.

En la facultad hay varias clases de mujeres, cada grupo va a tener actitudes y preferencias diferentes. Empecemos por las solteras, que a los veintipico de años no consiguieron nada y mueren por ponerse de novias. Nos van a hacer creer que “están bien así”, que están disfrutando de la vida, que nunca jodieron tanto, etc. Quizás sea verdad, quizás no, seguramente no es lo que buscan. Ellas sueñan con encontrar al hombre ideal. Esas se van a enamorar del primero que les diga te quiero. Obviamente todas sus amigas salen viernes y sábado con los novios y ellas se tienen que conformar con el Chat. A veces hacen reunión de solteras, ven una película en DVD y se divierten criticando los noviazgos de sus amigas: “Hace todo lo que él dice por miedo a que la deje”, “Él la debe cagar cada vez que sale con los amigos”, “Desde que se puso de novia no sale más”. Claro que lo hacen de envidiosas porque les encantaría tener una compañía. De vez en cuando tienen una alegría aunque no de la forma en que les gustaría, un “touch and go” digamos. Cansadas de que las usen durante toda la adolescencia se van a enamorar de lo que encuentren, la desesperación las va a llevar a eso. ¿Que mejor que una chica desesperada para calmar nuestra calentura? Pero cuidado, no es tan fácil y placentero como parece…Generalmente son todos bagallos. Por eso a ellas las vamos a dejar para el segundo cuatrimestre. Aunque si acarreamos una mala racha, también pueden ser útiles y fieles compañeras.

Contáme si le diste a alguno de estos bichitos de la facu… ¿Dónde fue? ¿Qué verso le metiste? ¿Fue tan fácil o tuviste que laburar unas semanas?

domingo, 5 de agosto de 2007

Chamuyo callejero en pleno día



Cuando caminamos por la calle vemos pasar hermosos cuerpos. Desde la vieja operada que sale del gimnasio hasta la secretaria que camina por el Centro. La colegiala que estudia a la vuelta de casa, la volantera de Cabildo que ofrece descuentos para hoteles alojamiento, la promotora que te da de probar el perfume; nos gustaría darle a todas. Fantaseamos y viajamos con la imaginación. Pensamos hasta la situación más insólita e imposible. Pero como hacer para acercarnos e intentar entablar una primera charla, un comentario que lleve a una respuesta por parte de ella. Es difícil que la mujer se detenga para hablar en la calle con un desconocido, casi imposible, pero de todas formas, con intentar no perdemos nada. En primer lugar la imagen es importante, la buena presentación frente a esta posible situación es lo primero en lo que se va a fijar la mujer. Es fundamental, y esto no me voy a cansar de repetirlo, que no se huela nuestra desesperación. Jamás tirar un elogio ni piropo en la calle si realmente queremos que nos vaya bien. Empecemos con un comentario de algo que esté sucediendo en ese momento, un hecho cotidiano o simplemente una pregunta que de pie a una primera charla, sin importar la temática. Un chiste o chascarrillo tampoco viene mal, siempre y cuando no caiga desubicado.

“Cómo tarda el bondi, estoy acá esperando hace media hora y no vi pasar uno” (con cara de “no lo puedo creer”, actuando un poco la situación): la chica probablemente responda con una frase breve (“si, es una vergüenza”), o quizás haga un gesto de disconformidad. Es importante el modo en que tiramos esa primera frase, tendremos que hacerlo con gracia y seguridad si queremos dar una buena impresión, y que no parezca que nuestra única intención sea el chamuyo. Obviamente no puede quedar todo en esa vaga queja sino que rápidamente tenemos que seguir el hilo de la conversación. No importa que al principio parezca que estemos haciendo un monólogo y que a nuestras preguntas o comentarios la chica responda con un simple monosílabo. Sigamos hablando, que quizás a la tercera pregunta ya se suelte un poco y podamos abordar otros temas. Intentemos llevar la charla hacia la vida cotidiana, a que se dedica, si tiene novio, etc. Un número de teléfono sacado en parada de colectivo, es algo positivo y es un buen primer paso para empezar con nuestro trabajo.

Claro que se pueden hacer otro tipo de exclamaciones.

· “¡Que deportista esta chica que sale a correr a estas horas de la mañana!”. (Con cara de sorprendido y sonriente al mismo tiempo). Una vez que nos tenga visto, ya que todos los miércoles nos la cruzamos por la misma esquina, intentemos saber algo más sobre ella.

· “¿Una mujer sola tomando un cafecito en un bar? ¿Necesita un poco de compañía quizás? Algún hombre que pueda escuchar sus problemas...Digámoslo con humor, sonriendo. Probemos ser comprensivos y espontáneos. Sorprendamos pero actuemos con normalidad.

Estos comentarios surgen de nuestra propia imaginación y percepción. Hablemos con confianza y seguridad. No caigamos en la común y en lo aburrido. La mujer busca al hombre divertido, seguro de si mismo. Por más que hayamos dicho un a estupidez porque no se nos ocurrió algo mejor para tirar, digámoslo seguros y que suene convincente. A veces vas convencido a decir algo y en el momento en que miramos a los ojos a la chica se nos pone la mente en blanco, no sabemos por donde empezar, transpiramos. Intentemos que sea un episodio natural y cotidiano.

¿Chamuyaste en la calle alguna vez? Contame tu experiencia ! !

jueves, 2 de agosto de 2007

Chamuyar es un arte


Las mujeres ocupan un lugar importantísimo en nuestras vidas. Para algunos, todo gira alrededor de ellas; para otros, sirven apenas para pasar un rato. Están quienes las eligen para pasar el resto de sus vidas y quienes las van cambiando. La necesidad y obsesión del hombre por el sexo opuesto y el constante deseo de llamar su atención, son fenómenos sociales.

Estar caminando y buscar esa mirada cómplice de la mujer desconocida que nos cruzamos en la calle, nos pasa a todos. ¿Que estará pensando ella? Quizás nos desvista con la mirada como lo hacemos nosotros , o tal vez, ni nos registre. Nunca lo vamos a saber. Sí podemos probar, intentar, jugar nuestras cartas para seguir caminando por la vida con la conciencia tranquila y con la seguridad que hicimos todo lo posible para lograr nuestro cometido. Si no nos fue bien, no pasa nada, pero estemos seguros que no haya quedado ningún “tirito” por tirar. Siempre nos vamos a encontrar con una más linda, más inteligente, más mujer. Cuando pensamos que nos enamoramos de la chica más hermosa, salimos a bailar y vimos a otra. Cuando nos cortó nuestra novia y creímos que nunca más ibamos a encontrar a alguien como ella, conocimos a una igual de dulce e inteligente, pero con el doble de tetas y con el culo todavía más parado. Ninguna relación es el fin del mundo ni un rechazo es un fracaso. Todo servirá para aprender y no volver a cometer los mismos errores.

Muchos tienen miedo a hablar con la mujer que tanto desean, miedo al rechazo o simplemente timidez. ¿Quién no sintió mariposas en la panza alguna vez? Pero todos necesitamos de una chica que piense en nosotros, que nos den unos besos, una agradable compañía, o simplemente una disponible, para cuando tengamos ganas… Hay mujeres fáciles, histéricas, rápidas, interesadas, vuelteras, pesadas…para todos los gustos.

La conquista es, sin duda, lo más importante, o “el chamuyo”, como prefieran llamarlo. La primera impresión es clave. ¿Cómo hacer para que la chica se detenga a hablar y no siga de largo? Obviamente no hay nada universal ni infalible en el tema. Lo que sí hay son algunos trucos o comentarios que suelen caer bien; lo natural, lo cotidiano, el buen humor, lo no forzado, el chascarrillo, lo apropiado, lo no desubicado.

¡Empecemos contando nuestras experiencias! En la calle, en la facultad, en el tren, en el colectivo, en el boliche, en el trabajo, en un semáforo... Cada uno tendrá técnicas diferentes. La intención es compartirlas, aprender y reirnos de nosotros mismos.